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Los equipos de Ultrasonido Obstétrico usan la misma tecnología del Radar: la emisión de ondas de sonido en una frecuencia inaudible (en MegaHertz -MHz-). Estas ondas al rebotar mecánicamente en los tejidos generan imágenes en movimiento de las estructuras visibles del bebé, las clásicas imágenes en tonos grises que son la base del estudio y el modo con el que se hacen los diagnósticos avanzados, no hay irradiación. El color añadido es artificial ya sea en el Doppler o en la imagen 3/4D del bebé.
Glosario y definiciones
Ultrasonografía, Sonografía, Ecosonografía, Ecografía: sinónimos todos. Implica la utilización de equipos emisores y receptores de “sonidos” de alta frecuencia (ultrasónicos, no audibles por el oído humano, (más de 20KHz, usualmente entre 3.5 y 9.5 MHz) que recogen los “ecos” de las estructuras estudiadas y las traduce en imágenes visibles; así, armamos imágenes complejas, incluso tridimensionales, del objeto en estudio, en nuestro caso, el bebé. En los países latinos usamos mucho el término “Eco, Ecografía” para referirnos a los estudios por Ultrasonidos (US). Voy a usar cualquiera de estos términos indistintamente.
Transductores: son las piezas del Equipo de Ultrasonidos que el médico sostiene en sus manos y que coloca en el cuerpo de la paciente para obtener la imagen del órgano o sistema deseado. Los hay de Superficie, como el que se coloca sobre tu abdomen (US Transabdominal o USTA) y Endocavitarios que sirven para hacer estudios a través de cavidades naturales como la vagina (US Transvaginal o USTV). En embarazos tempranos (menores de 13 semanas) la vía transvaginal nos permite obtener una imagen de alta resolución de un bebé (embrión o feto) de 3 a 85 mm de longitud que por otras vías seria imposible de evaluar
Ecosonografía Obstétrica: es el estudio exclusivo del útero gestante y su contenido. Hace especial énfasis en la evaluación del Feto (Anatomía y Fisiología Fetal) y sus Anexos (Placenta, Cordón Umbilical y líquido Amniótico).
Ecosonografía Doppler: este es un estudio especializado que tiene como objetivo la evaluación del estado circulatorio del feto y su madre. Mediante su uso podemos detectar precozmente el riesgo potencial de trastornos del crecimiento fetal, compromiso del bienestar fetal y enfermedades hipertensivas en la madre. Requiere equipos sofisticados y costosos. Mediante el Doppler podemos oír el sonido amplificado de los latidos y ver mediante colores artificiales la dirección del flujo sanguíneo Fetal y Materno.
Ecosonografía Obstétrica de Segundo Nivel (II Nivel): se conoce también como Ecografía Avanzada ya que implica la utilización de equipos de alta resolución manejados por especialistas con gran experiencia en la detección de trastornos estructurales y funcionales del feto. Este es un estudio orientado a descartar anomalías fetales o determinar el origen de una anomalía previamente detectada. En manos experimentadas podría detectar hasta un 95% de los problemas fetales dependiendo del órgano o sistema afectado. Caso contrario, un estudio normal sin anomalías visibles garantiza enormemente que tu bebé sea sano.
Ecosonografía Genética: estudio especializado con equipos de alta resolución que tiene como objetivo descartar la presencia de marcadores (pequeños cambios orgánicos estructurales) que se asocian a problemas cromosómicos, Síndromes genéticos y anomalías congénitas complejas. Los hay de dos tipos: Primer Trimestre (11 a 13.6 semanas) y Segundo Trimestre (18 a 23 semanas).
Ecosonografía Tridimensional (US-3D): es la obtención de imágenes Tridimensionales de todo el bebé (antes de la semana 14 del embarazo) o partes de él (rostro, genitales, miembros, etc). Solo implica la obtención de imágenes 3D sin hacer referencia al resto del estudio. Muchas personas confunden al US-3D con el estudio de II Nivel cuando son en realidad estudios diferentes: lo cierto es que en la mayoría de los Centros serios donde se practica la US-3D el estudio realizado incorpora el estudio de II Nivel, evaluación Doppler y la obtención de imágenes 3D; es por esto que se ha generado algo de confusión al respecto. Los equipos Doppler 3-4D son los más avanzados y costosos del mercado.
Ecosonografía Tetradimensional (US-4D): con los equipos comerciales de última generación es posible obtener imágenes Tridimensionales de un bebé en movimiento tiempo real (4D); así pues, la cuarta dimensión se refiere a la imagen en movimiento de un bebé en 3 dimensiones. Puedes ver un corto video ultrasonido 4D aquí.
Ecosonografía 5D (US-5D): es una nueva tecnología de Samsung que genera volúmenes, imágenes 3D y múltiples cortes automatizados que facilitan enormemente el diagnóstico de órganos estáticos y dinámicos fetales. La evaluación cardíaca permite cortes simultáneos con todo lo necesario para descartar o diagnosticar cardiopatía congénita; así mismo, facilita la evaluación del SNC (Sistema Nervioso Central), esquelético y la evaluación genética fetal
Alcances
¿Es adecuado un diagnóstico tan avanzado?
El “peligro” de estos estudios tan acuciosos es que podrían detectar con un problema fetal: suena ilógico pero hay personas que no toleran la angustia de saber de antemano que existe un problema, pero la mayoría de los pacientes prefieren saberlo para tomar decisiones y preparase. Afortunadamente la mayor parte de los bebés son sanos y los padres agradecen un estudio que descartó muchísimas enfermedades
¿Con que frecuencia hay algún hallazgo estructural?
Encontramos algún marcador positivo o variación anatómica en solo 1 a 2 de cada 100 pacientes estudiados (1-2%). La mayor parte de esos hallazgos se consideran variantes anatómicas normales, uno que otro caso pasa a otros estudios incluyendo Amniocentesis y rara vez se encuentra un caso realmente patológico.
¿Trastornos funcionales?
Estos se encuentran con una frecuencia mucho mayor. Aproximadamente 5 a 10 casos por cada 100 pacientes presentará algún trastorno funcional (crecimiento fetal retardado, sufrimiento fetal, alteraciones circulatorias, disminución del líquido Amniótico, etc.) detectado por Doppler y otras pruebas ecográficas. La mayor parte de ellas serán leves y ocasionalmente encontraremos algún caso severo en el que el US será el arma decisiva para determinar el mejor momento para la interrupción del embarazo.
Limitaciones del método
los estudios por ultrasonido no son métodos perfectos y pueden fallar en la detección de problemas maternos o fetales.
Los avances tecnológicos y las habilidades y conocimientos del operador son determinantes en la calidad del estudio, si hay algún problema detectable el operador lo detectará, pero dependerá de estos 4 factores:
- Equipo: los más modernos y altamente tecnificados están diseñados para obtener imágenes de muy buena calidad y gran lujo de detalles gracias a su alta resolución y definición imagenológica pero los costos limitan la disponibilidad de estos equipos y usualmente los estudios son más costosos para el paciente.
- Operador: nada se lograría con el mejor equipo disponible si su operador no está capacitado para realizar un estudio de calidad. La preparación y la capacidad diagnóstica del especialista es el elemento que con mayor frecuencia determina la calidad de un estudio
- Paciente: en pacientes con gran panículo adiposo (obesidad central) el equipo pierde mucha capacidad diagnóstica.
- Feto: existen condiciones que no se manifiestan o son tan pequeñas que no son detectables. La disminución del contenido de Líquido Amniótico limita severamente la calidad del estudio
La ecografía no es juego
Añadimos a nuestra práctica obstétrica diaria herramientas que harían palidecer de envidia a nuestros antecesores: tenemos equipos que nos permiten husmear dentro de la “casita” del bebé y evaluar su desarrollo, crecimiento y bienestar; podemos verlo por fuera y por dentro, saber con absoluta seguridad el color azul o rosado (metáfora sobre el sexo fetal) de su futura ropita o si tendremos que comprar todo doble; en fin, vemos al bebé en su ambiente natural, anteriormente secreto, para descubrir poco a poco su maravillosamente pequeño pero complejo universo.
Aunque divertido y en ocasiones informal, el estudio por ultrasonidos es un acto médico serio que requiere mucha preparación y responsabilidad en su ejecución. El resultado del estudio debe ser plasmado en un informe detallado avalado por un especialista certificado en el área.
A pesar de que nunca se ha reportado un sólo caso de daño fetal atribuible al uso médico de los ultrasonidos, en más de 30 años de uso, nos cuidamos mucho de no ejercer mucha o prolongada presión o manipulación uterina excesiva. Vale decir, una vez obtenida la información necesaria se suspende el estudio porque no tiene sentido seguir molestando al bebé; esto es especialmente válido en el estudio 3-4D: si el bebé no se deja ver la carita en un tiempo prudencial se declara culminado el estudio, ¡ya habrá tiempo para verla cuando nazca!